ESTUDIANTES INTOXICADOS

El jueves de esta semana se dio a conocer la noticia de 410 estudiantes de la Escuela Oficial Rural Mixta, en San Rafael Petzal, Huehuetenango que resultaron intoxicados debido a la ingesta de alimentos contaminados, posiblemente con la bacteria estafilococo. Los menores consumieron una refacción fabricada por la junta escolar que consistió en arroz con leche y tortillas con pollo y mayonesa que se cree, no fueron manipulados con las medidas de higiene necesarias. A causa de este descuido, los niños y niñas padecieron de vómitos y diarrea.

Me parece inconcebible y despreciable que los niños asistentes a las escuelas reciban pocas atenciones, cuidados y sean victimas de tragedias como esta. Es evidente que el Estado “cumple” con la alimentación de los niños por obligación y no porque realmente les interese, pues de ser así, sucesos como este no ocurrirían, y menos a tal escala.

Este Gobierno ha efectuado varios préstamos para “inversión social”, me pregunto entonces ¿acaso mejorar en la educación y alimentación de las niñas y niños estudiantes no es también inversión social?. El presupuesto asignado para la alimentación escolar es de Q685 millones, por lo que se destina entre Q.1.50 y Q1.70 diarios por niño, según una nota presentada en un medio impreso local. No comprendo entonces por qué este gobierno, si se autodenomina preocupado por el aspecto social, no dignifica las condiciones de los menores estudiantes, en concepto de infraestructura, alimentación y la calidad de educación. Pero pensándolo bien si lo comprendo, no es una de sus prioridades.

Aunque a algunas autoridades les parezca más bien una carga presupuestaria, los niños no son cargas, ni mucho menos cosas, son seres humanos que merecen respeto, así como recibir buena educación y alimentación en las escuelas públicas, pues es un deber del Estado. Son seres humanos con sueños, ilusiones, una vida por delante y no merecen comer mierda.

Preguntas llegan a mi mente ¿Cómo se sentirán los niños afectados y sus padres después de este incidente? Imagino que su motivación en asistir a la escuela y aprender puede haber disminuido, que se han decepcionado del sistema, que su confianza en el gobierno ha menguado o cesado. Imagine usted el dolor de los padres de esos niños, en especial de los nueve que estuvieron graves, al pensar que los perderían por un estúpido descuido e irresponsabilidad. No es justo.

Este incidente debe de servir para tomar medidas y dignificar las condiciones de de los estudiantes de escuelas públicas. No se puede volver a repetir.