jueves, 9 de octubre de 2008

GEORGE ORSON WELLES Y LA GUERRA DE LOS MUNDOS

George Orson Welles nació el 6 de mayo de 1915, en Wisconsin, Estados Unidos. Este productor (radio, cine) y locutor saltaría a la fama con la adaptación radial de una novela de ciencia ficción.

El trabajo de Welles en radio se desarrolló principalmente en la cadena estadounidense CBS. En 1938 se asoció con John Housman y conformaron el “Mercury Theater in the Air”, en la CBS.

El 30 de octubre de 1938, a las 8:00 a.m. de la mañana, Welles representó una adaptación literaria de “La guerra de los mundos”, obra del autor Herbert George Welles, la cual se convertiría en todo un hito histórico en el medio radial. A esa hora se solía transmitir obras de radio teatro. Sin embargo en ésta producción, Welles deseaba añadir una dosis extra de realismo, por lo cual trasmitió su mensaje en forma de cápsulas noticiosas.

La dramatización consistía en informar que astrónomos acababan de descubrir que en Marte había ocurrido una serie de extrañas explosiones, las cuales desembocaron con la caída de un meteorito en la tierra, justamente en la localidad de Grovers Mill, Nueva Jersey. Luego especificaron que no se trataba de un meteorito, sino de extraño objeto cilíndrico, además se dijo que muchas personas se reunieron en el lugar y presenciaron que del objeto caído del universo salían criaturas monstruosas. Estos seres extraños lograban matar con suma facilidad a los soldados que acudieron al lugar para contraatacar pero los marcianos avanzaban en su invasión hacia New York.

La transmisión era sumamente realista, con gritos, reporteros hablando de forma agitada, por lo cual se produjo temor e histeria en los pobladores, pues pensaban que se trataba de invasión alienígena. Hubo reportes de personas que se encerraron en su sótano armados, otros tantos que se colocaron toallas mojadas en la cara para protegerse de los gases venenosos de los extraterrestres, incluso hubo llamadas de alerta a la policía. La dramatización provocó tal conmoción, a pesar que al inicio, y tres veces después, se explicó que se trataba de ficción.

En ese entonces la radio contaba con gran credibilidad, la gente creía todo lo que en ella se decía. El programa, que llegó a 6 millones de personas, causó gran polémica cuando quienes creyeron que era real, descubrieron que no lo era. Tan grave fue el hecho que la policía allanó la radio, y tomaron todos los materiales que habían sido utilizados para esta producción, a excepción de un guión, el cual conservó un compañero de Welles. Posteriormente Welles se excusó con las autoridades y audiencia en general, argumentando que no pretendió causar tal impacto y temor dentro de la población, se escudó y recordó que en la transmisión se dijo cuatro veces que simplemente se trataba de ficción. El evento acaparó la portada de varios medios impresos, incluyendo el New York Times.

Para la radio fue un evento memorable y glorioso, pues se descubrió el impacto y poder de una narración bien estructurada y efectuada. Esta dramatización puso de manifiesto que en efecto, la radio es un medio poderoso, capaz de mover masas. Se evidenció también la fugacidad en los mensajes.

La historia generó también cuestionamientos sobre la ética y responsabilidad que deben manejar los medios masivos de comunicación.

No hay comentarios: